jueves, 20 de marzo de 2008

La procesión no va por dentro

Esta mañana la procesión no iba por dentro. Televisaron las imágenes de los sevillanos llorando de nuevo. Sus lágrimas se confundían con las gotas de lluvia que les impedían aupar a hombros los pasos y pasearlos por sus preciosas calles con esa devoción que hace que se ericen los pelos del más agnóstico.
Y yo me pregunto: si sacan los santos para atraer las nubes y que el agua caiga, ¿cómo va a distinguir el pobre cielo si la procesión es para pedir perdones o para pedir lluvias?.

sábado, 8 de marzo de 2008