domingo, 20 de mayo de 2007


"...Te espero sin estaciones, sin horas, sin tiempo, sin condicionamientos, eternamente te espero......Sintiendo tus pasos, a veces escucho un suave rumor como petalos de jazmin bailando con el viento"

martes, 8 de mayo de 2007

Relato robado: El ladrón de hachas

Un hombre no encontraba su hacha. Sospechó del hijo de su vecino y se puso a observarle. Su porte era típicamente el de un ladrón de hachas. Su rostro era el de un ladrón de hachas. Las palabras que pronunciaba no podían ser más que palabras de un ladrón de hachas. Todas sus actitudes y comportamientos revelaban al hombre que ha robado un hacha. Pero inesperadamente, cuando removía la tierra, el hombre encontró de pronto su hacha. Cuando al día siguiente volvió a mirar de nuevo al hijo de su vecino, este no presentaba nada, ni en el porte, ni en el comportamiento, que evocase a un ladrón de hachas.
"El cuarto de al lado"
Gustavo Martín Garzo